En un entorno de constantes desafíos, la comunicación en salud se posiciona como un componente indispensable para diseñar estrategias que fortalezcan la relación entre el sector médico y la comunidad, contribuyendo a mejorar la salud pública a largo plazo.
Desde la promoción de campañas hasta la gestión de crisis, la eficacia depende de cómo se transmite la información. Una comunicación efectiva educa, conecta con las poblaciones y refuerza la confianza en todo el sistema.
Continúa leyendo para descubrir cómo optimizar tus habilidades comunicativas y contribuir a un futuro más saludable y resiliente.
Tabla de contenidos
¿Qué es la comunicación en salud?
La comunicación en salud desempeña un papel vital al educar a las personas sobre temas que pueden mejorar significativamente su calidad de vida. No solo facilita la realización de campañas de promoción y concienciación para prevenir enfermedades, sino que también fomenta la toma de decisiones informadas y acertadas. Sin embargo, una estrategia efectiva debe estar preparada para gestionar situaciones críticas que podrían afectar la reputación o el funcionamiento de una organización.
El objetivo de la comunicación es influir positivamente en el comportamiento de la audiencia, mediante la difusión de mensajes que fomenten hábitos y estilos de vida saludables, así como proporcionar información accesible para la preparación ante emergencias sanitarias. Según explica un estudio de la Organización Panamericana de la Salud, las estrategias de comunicación incrementan el conocimiento de los usuarios, abordando problemas específicos y explorando posibles soluciones.
¿Por qué es importante la comunicación en la salud?
Una estrategia efectiva de comunicación nos capacita para entender las necesidades específicas de las poblaciones, lo que facilita el diseño de campañas dirigidas con precisión a las audiencias seleccionadas. Además, prepara a las organizaciones para responder de manera ágil ante emergencias, mejorando así su capacidad para mitigar cualquier impacto negativo.
En la era digital, la manera en que las personas acceden a información médica está experimentando una rápida evolución. Según explica un estudio de 2022 realizado por la firma Tebra, que encuestó a más de 1,200 personas sobre sus preferencias en atención médica, tres de cada cuatro individuos buscan información médica en internet, especialmente al buscar nuevos proveedores de atención.
Por otra parte, los pacientes muestran disposición para interactuar en redes sociales con sus proveedores de salud. Aunque solo el 18% de los encuestados afirmaron seguir la oficina de su médico en redes sociales, el 45% indicó que lo haría si el médico publicara contenidos de interés regularmente.
Hoy en día, contamos con diversos canales que permiten adaptar nuestros mensajes a los intereses de diferentes audiencias, fomentando así la participación social. Utilizando estas herramientas de manera efectiva, las organizaciones de salud pueden construir bases sólidas que fortalezcan su capacidad para enfrentar futuros desafíos y mejorar continuamente la salud pública.
¿Cuál es la importancia de los medios de comunicación en la salud?
La influencia de los medios de comunicación va más allá de la simple difusión de información; también desempeñan un rol importante en la formación de opiniones y comportamientos relacionados con la salud. A través de plataformas como televisión, radio, prensa y medios digitales, tienen la capacidad de alcanzar amplias audiencias y promover rápidamente campañas que contribuyen a la promoción de políticas públicas saludables.
Durante una crisis, los medios se convierten en aliados clave al proporcionarnos la oportunidad de clarificar información y transmitir mensajes precisos que tranquilicen y orienten al público de manera efectiva; asimismo, en emergencias sanitarias, facilitan la gestión adecuada de la respuesta comunitaria.
Importancia de la reputación y gestión del riesgo en la salud
La reputación y la gestión de riesgos en el sector de la salud están estrechamente relacionadas con la percepción de la calidad médica. Incidentes como errores médicos no intencionados, manejo inadecuado de emergencias o respuestas inapropiadas ante crisis, por nombrar algunos, pueden impactar negativamente la reputación de un centro de salud y el bienestar de empleados, pacientes y el público en general.
Para mitigar estos riesgos, es fundamental anticiparlos y preparar al personal médico adecuadamente. Un manual de comunicación de crisis en el sector de la salud es esencial para gestionar eficazmente situaciones adversas.
En Diez, hemos trabajado con más de 15 instituciones, tanto públicas como privadas, en este sector. A cada una de ellas le hemos gestionado su reputación de manera efectiva, gracias al buen uso de un manual de crisis y otras estrategias. Escríbenos para analizar las necesidades de tu organización y así mantener su reputación impecable.
Algunos riesgos asociados incluyen:
- Riesgos clínicos: incluyen errores médicos, complicaciones en el tratamiento y otras situaciones que afectan directamente la atención médica y la salud de los pacientes.
- Riesgos operativos: abarcan problemas infraestructurales y logísticos que pueden comprometer la capacidad de un centro de salud para operar eficientemente, afectando la atención y la respuesta ante emergencias.
- Riesgos financieros: se refieren al impacto en la percepción de la capacidad de una institución médica para ofrecer servicios de alta calidad, influenciados por problemas presupuestarios.
La comunicación asertiva en salud
En el ámbito de la salud, una comunicación efectiva mejora la interacción con los usuarios. Estas son algunas herramientas útiles que puedes utilizar para lograrlo:
- Contenidos de calidad: los comunicados de prensa deben proporcionar datos valiosos y garantizar que la información sea clara y comprensible para el público.
- Lenguaje sencillo y evitar tecnicismos: es importante evitar el uso de vocabulario técnico que pueda resultar confuso, utilizar palabras sencillas facilita la comprensión del mensaje. Además, acompañar la información con imágenes como gráficos, infografías o fotografías enriquece el contenido y mejora la claridad del mensaje.
- Dedicación al SEO: una estrategia editorial enfocada en SEO es crucial para posicionar el contenido en los motores de búsqueda. Esto no solo aumenta la visibilidad de la marca, sino que también facilita que los usuarios encuentren información relevante sobre salud cuando la necesiten.
- Interacción en redes sociales: las redes sociales han transformado la divulgación en salud, convirtiéndose en un recurso invaluable para difundir campañas de gran impacto y medir su efectividad.
En un entorno dinámico y en constante cambio, la comunicación en salud se posiciona como un instrumento capaz de mejorar la calidad de vida de las poblaciones, facilitar el desarrollo de campañas, fomentar la toma de decisiones informadas, gestionar crisis de reputación de manera efectiva y fortalecer la confianza de los usuarios en los servicios de salud.